Maestro Luis Nishizawa Flores
Nació en una hacienda de San Mateo Iztacalco en el municipio de Cuautitlán en el Estado de México en 1918 y murió el 29 de septiembre de 2014. Hijo de padre japonés y madre mexicana, fue pintor, dibujante y retratista.
Luís Nishizawa vivió sus raíces desde una perspectiva autónoma: “En mi obra no intento ser japonés ni mexicano sino artista. Si algo brota del Japón en un cuadro, será la sangre que llevo, y no un prejuicio. Lo cierto es que ambos países son ricos en cultura”.
Si bien creo en el talento de mucha gente, también creo en el valor de la academia. Primero, es necesario conocer la técnica, ser artesano. Ya luego puede uno pensar en ser artista, todo depende de cuánto demos a cambio.
Entre las obras del creador, sobresalen: Nocturno, Mirasoles, Festival, Serranía cora, El sueño de mi madre, El sueño del niño bobo, Camarones, Charales, La pasión de Ixtapalapa, Retrato de María, Don Hermilo...mi amigo, Mi hijo Gabriel, Mi hijo Luís, Mi pequeña Adriana, Autorretrato y Mi padre en sus largos días. Todas realizadas con un alto contenido poético que juega con la irrealidad de la cotidianeidad hasta caer en un abstraccionismo como síntesis del pensamiento humano.
Maestro Leopoldo Flores Valdés
Nació en el año de 1939, fue ganador de premios como el Meztli en 1964 y años más tarde, en 1967 el Premio de Adquisición en Pintura otorgado por el INBA.
Originario del Estado de México, el artista plástico denuncia con su obra, en su mayoría de grandes dimensiones, los problemas sociales y lo caótico de la naturaleza humana al convertirse en un vocero de su tiempo. Ha realizado obras en diversos formatos, variadas técnicas y diferentes materiales que van desde el tradicional lienzo, hasta el trabajo directo sobre la roca pasando por la realización de un enorme vitral.
Es en la ciudad de Toluca en donde se encuentra la parte más cuantiosa de su obra. Entre los murales fijos se tiene: “El Hombre Contemporáneo” en el Hotel Plaza Morelos de 1971; “El Hombre Contemplando al Hombre” en el Palacio del Poder Ejecutivo de 1972-83; en 1985 pinta “Alianza de las Culturas” dentro del edificio de la Alianza Francesa de Toluca; “El Hombre Universal” en el Centro de Investigación en Ciencias Sociales de la UAEM, de 1989; de 1991 a 1992 pinta “En Búsqueda de la Justicia” en la Procuraduría General de Justicia, y diez años más tarde, dentro del Colegio Mexiquense pinta “De qué color es el Principio”. También incursiona en la escultura realizando la obra “Tocando el Sol” que se encuentra en el edificio de Rectoría de la UAEM en 1995.
En la ciudad de Toluca existen dos obras que merecen reconocimiento por las técnicas y formatos utilizados:
- El “Cosmovitral”, que consta de una serie de 48 vitrales, con una extensión aproximada de 2000 metros lineales, cuya temática, en estilo figurativo, se desarrolla alrededor de la dialéctica y la dualidad universal, la oposición de la noche con el día, de la mujer con el hombre, del bien con el mal, es una síntesis de luminosidad cargada de expresión cosmogónica.
- “Aratmósfera”, que tiene como soporte las rocas del cerro de Coatepec y la gradería del estadio Universitario.